jueves, 26 de febrero de 2015

EL ANNUAL REPORT 2014 DE PIRELLI LLEVA “EL NEUMÁTICO A LA CALLE”

 

El Street Art (Arte urbano), con su creatividad sin límites y formas únicas, es la base argumental del proyecto de comunicación que formará parte del Annual Report 2014 de Pirelli (Informe Anual de Cuentas).


La artista brasileña Marina Zumi, el alemán Dome y el ruso Alexey Luka, tres de los nombres más interesantes del mundo del arte callejero, han interpretado el neumático, a través de tres obras reunidas en una única instalación: una pirámide truncada, de unos cinco metros de altura, con tres lados con una superficie de más de veinte metros cuadrados, que se mostrarán entre el 26 y el 28 de febrero en el Hangar Bicocca de Milán, la sala de exposiciones que la compañía patrocina en la ciudad originaria de la empresa. Este trabajo mantiene la tradición comunicativa, que se ha convertido en un sello de la cultura corporativa de Pirelli, y que ha encontrado aquí el lugar ideal para su creación.


Por primera vez en su historia, Pirelli ha elegido esta forma de expresión, porque la calle, la movilidad y el multiculturalismo típicos del arte urbano, son también parte de su propia cultura. Precisamente en las calles y en las carreteras, así como en la necesidad de la gente de trasladarse, adquieren los neumáticos su significado.

A lo largo de su historia, Pirelli ha descrito sus neumáticos no sólo en términos de su función, sino llevándolos fuera de contexto y permitiendo que éstos evoquen mundos, valores, aspiraciones y sueños capaces de dar un "alma de goma" a un objeto que, aparentemente, podría no parecer más que un mero objeto negro y redondo; un producto que, en realidad, no es nada fácil de producir y que encarna la tecnología y la innovación - el resultado del talento y la pasión de las personas por lo que hacen.

Este aspecto ha sido subrayado por el trabajo de innumerables artistas, que, durante el transcurso del siglo XX, transformaron los neumáticos en una cadena (Ezio Bonini), en un león y un elefante (Armando Testa), un sombrero (Alessandro Mendini), o un ojo, un paraguas y un sombrero (Riccardo Manzi).

En años más recientes, los neumáticos han aparecido como un refugio de la lluvia, como instrumentos musicales y gafas para mirar hacia el futuro (Stefan Glerum). Hoy, el neumático continúa su recorrido y, a través del arte urbano, se ha convertido en una luna, según Marina Zumi, el protagonista de un gesto de amor, según Dome, y una unión entre culturas, según Alexey Luka.

En 2010, el Informe Anual de Pirelli se ilustró con imágenes de estudiantes de fotografía del NABA de Milán; en 2011, con ilustraciones de Stefan Glerum y textos del filósofo Hans Magnus Enzensberger y los escritores Guillermo Martínez, William Least Heat-Luna y Javier Cercas; en 2012, en una edición reconocida con el "Certificado de Excelencia Tipográfica" del Club Type Directors de Nueva York, con caricaturas de Liza Donnelly, dibujante del New Yorker; y por último, en el Informe 2013, 10 jóvenes talentos internacionales, coordinados por el escritor y guionista Hanif Kureishi, trabajaron en el concepto de la rueda, "reinventándola" a través de sus propias disciplinas.

En el Informe 2014, el trabajo de estos artistas urbanos aparecerá no sólo en forma de imágenes impresas, sino en una serie de videos que, en la versión digital, narrarán el proyecto y el trabajo de sus protagonistas.

"Street Art", explica Christian Omodeo, un experto en este ámbito y creador artístico del proyecto, "se describe a menudo como una nueva vanguardia, como un movimiento artístico coherente y la expresión de una cultura única, joven e internacional. En realidad, lo que hace del arte callejero algo tan revolucionario es una comunidad multicultural Implicada en una interacción constante en la web, intercambiando diferentes visiones del mundo. Los artistas urbanos no siguen un estándar artístico mundial, sino que adaptan su lenguaje artístico al contexto geográfico, cultural y social de la ciudad en la que se encuentran. Al mismo tiempo, no tienen una relación convencional con el espacio urbano. Van más allá de los límites impuestos por el sentimiento común, la exploración de las áreas olvidadas de nuestras ciudades e, inconscientemente, resucitan aquellos “no lugares” que, según el sociólogo francés Marc Augé, tienden a hacer que la vida en las metrópolis contemporáneas se torne tan alienante. Este dinamismo, la energía y la capacidad de devolver a la vida a través del dibujo un potencial que la mayoría de las personas no ven, es algo que se hace evidente para mí en las habilidades narrativas de Pirelli, así como en su enfoque de la industria.".

La iniciativa #TakePArt
Para la ocasión, Pirelli ha lanzado en redes sociales una iniciativa llamada #TakePArt. Esta campaña pretende involucrar a los visitantes del Hangar Bicocca, invitándolos a tomar fotos de la obra de los tres artistas y compartirlas en redes sociales, a través del hashtag #TakePArt. Las imágenes más originales se publicarán en los canales Pirelli de sus redes sociales.


LOS PARTICIPANTES EN EL PROYECTO "STREET ART"


Christian Krämer aka DOME
Nacido en 1975, el ilustrador y artista callejero DOME vive en Karlsruhe, donde crea sus obras. Fascinado por el arte urbano, en 1994, descubrió la pintura de aerosol como instrumento de expresión artística, y comenzó a pintar paredes. Su estilo aparece como una visión surrealista de la condición humana: le gusta representar partes individuales del cuerpo fuera de contexto, y en 2011 perfeccionó un sistema de construcción modular, componiendo sus obras con elementos repetidos, que sólo varía girándolos 45°. Este método le da la libertad - un concepto fundamental en las culturas de arte urbano - de transformar rápidamente una parte de una composición sin tener que empezar de cero. DOME utiliza lápiz y tinta china, así como el acrílico para crear sus figuras.
Sus obras invitan al espectador a explorar los pensamientos y las emociones que suscitan imágenes surrealistas, que se inspiran en la arquitectura barroca, motivos florales, elementos arquitectónicos y altares que adornan los fondos. En sus temas, a menudo habitan paisajes, escenarios y plataformas, y se acompañan de avisos escritos en una fuente que el propio artista ha creado para este fin.
"Las siluetas de dos seres humanos, inspiradas en el teatro de sombras, se reúnen en un fondo de cuadros. El hombre, con el rostro cubierto por una máscara de alces, empuja una carretilla con una rosa, dirigida a la mujer que ama. Esta es la prueba de que el amor y la pasión llevan al hombre más allá de los límites de lo convencional y a explorar nuevos caminos, aunque sea enfrentando innumerables obstáculos. El cartel dice "La innovación requiere pasión", porque ésta nace cuando alguien ama y cree de en lo que está haciendo. En este caso, el sentimiento está encarnado por la rosa de la carretilla, y por las raíces y la tierra que necesita para sobrevivir. ".

Alexey Luka
Nacido en 1983 y residente en Moscú, Alexey Luka es uno de los más innovadores jóvenes artistas e ilustradores rusos de hoy. Después de debutar como artista de graffiti, estudió en el Instituto de Arquitectura de Moscú y comenzó a crear una nueva forma de arte callejero. Cercano a la tradición de la vanguardia rusa, se orienta menos hacia la crítica de la sociedad de consumo y la cultura pop, tan típica de la cultura occidental. Influenciado por artistas como El Lissitzky y Wassily Kandinsky, la investigación artística de Alexey Luka se inspira en la interacción con la arquitectura urbana, dónde incorpora pinturas e instalaciones dominadas por líneas de color y curvas. Su técnica, perfeccionada mientras trabaja en las calles, se basa en un análisis digital de las formas que utiliza para componer obras tridimensionales en madera y otros materiales. Luka tiene vínculos biográficos y artísticos muy estrechos con Moscú, logrando reconocimiento internacional en 2010, gracias al auge de Internet que se extendió a través de Rusia. Sus obras, que son geométricas y fragmentadas como puzles, son ahora parte del paisaje urbano de muchas ciudades de todo el mundo. Además de participar en exposiciones colectivas en prestigiosas galerías de arte urbano, como el Openspace en París, el Mini Galerie en Amsterdam y 1AM SF en San Francisco, ha expuesto recientemente en solitario: “Long Tomorrow”, en la Galería Pechersky de Moscú, y “Late. Still LIfe”, en la Enjoyted de Lyon.

"Fueron las formas geométricas de la arquitectura de Moscú, la ciudad donde nací y crecí, las que me inspiraron a buscar códigos de abstracción, y dónde surge el deseo de combinarlos con el universo biológico - en forma de plantas y seres humanos - que habita en los espacios urbanos. Esta es la combinación del lenguaje narrativo que expreso en los distintos lugares en los que pinto. La obra de arte del Hangar Bicocca narra el encuentro entre diferentes culturas en ciudades que son cada vez más multiculturales. A partir de este intercambio fortuito entre diferentes culturas, simbolizadas por las dos figuras abstractas que convergen en el centro de la pared, toman vida nuevas formas biológicas, una planta en este caso. La presencia repetida de círculos negros y la inclusión de un neumático recuerdan un elemento esencial de la vida urbana. ".

Marina Zumi
Nacida en Argentina en 1983, Marina Zumi ha vivido mucho tiempo en São Paulo, Brasil, donde crea sus obras. Muy pronto, se puso en contacto con la escena de arte urbano y fue una de los primeros participantes de las Sesiones de Expresión, un grupo de prácticas experimentales en Buenos Aires. Una de las pocas mujeres de arte urbano de São Paulo, su estilo colorista tiene un toque femenino, influenciado por su formación como estilista. Sus graffitis, que crean un oasis de tranquilidad en el bullicio y el tráfico de la ciudad, se impregnan con elegante magia. Sus creaciones de estudio, por otro lado, cuentan con mayor sustancialidad: mediante la incorporación de oro, plata e hilos negros, se acerca a las teorías del arte concreto, que se inspira en la naturaleza, el universo, la geometría sagrada, la teoría cuántica y la vida diaria. Marina Zumi aspira a liberar un flujo de energía, que simboliza la unión entre todos los seres vivos, que ella representa como un motivo recurrente de siete líneas, con un elemento central y tres resonancias positivas y tres negativas.

Actualmente, esta artista argentina continúa trabajando en piezas autónomas y colectivas en las calles y galerías de todo el mundo. La evolución de sus graffitis, desde sus primeros días a la actualidad, ha sido un viaje muy personal y una forma completamente independiente de desarrollo y enriquecimiento.

"A través de las figuras animales que encarnan las virtudes humanas, mis obras reflexionan sobre la actualidad y en el mundo moderno. El ciervo representa un espíritu sabio que es capaz de mantener la calma y la sensatez, incluso en medio de la adversidad. En este caso, su atención es capturada por la luna (que tiene la forma de un neumático), en lugar de por el sol o por las innumerables estrellas del cielo. Por la luna, que es el único puerto seguro para la humanidad. Durante la noche, la luna nos muestra el camino a seguir y la manera de superar nuestros límites. Si no hay luna, no hay luz, no hay esperanza y, sobre todo, no hay manera de avanzar. "


Christian Omodeo

Nacido en Roma en 1976, pero residente en París, Omodeo trabaja como crítico y director artístico. Después de estudiar Historia del Arte en Italia, trabajó en el Instituto Nacional de Historia del Arte entre 2005 y 2010, y en 2011 consiguió su doctorado en la Universidad de París-Sorbona, recibiendo el Premio de Nicole. De 2010 a 2013 fue profesor de Arte Contemporáneo en la Universidad de Picardie Jules Verne en Amiens, trabajando en paralelo con el Musée Fesch en Ajaccio. Reconocido como uno de los mayores expertos en arte de la época napoleónica, en 2012 puso en marcha Le Grand Jeu, una agencia especializada en arte urbano, con el fin de dedicarse exclusivamente a los nuevos lenguajes artísticos, que ha estado estudiando desde 2008. Comisario del primer Outdoor Festival en Roma en 2010, y uno de los promotores del Tour Paris 13 en 2013, ha organizado exposiciones, talleres y conferencias en toda Europa. Con sus últimos libros - "C215, un maître du pochoir", "Crossboarding. Una historia italiana sobre el papel del Graffiti y del Street Art" y "Dominique Philbert ERO. Expresiones Urbanas Místicas", publicado en 2014 – se ha situado como uno de los críticos de arte urbano más reputados, así como uno de los pocos historiadores sobre el graffiti en Europa. 

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